Nuestra gama de fondos de inversión GPS (Global Portfolio Strategy) son carteras cuya composición viene determinada por una distribución óptima de activos para cada uno de los perfiles de riesgo definidos por nuestra Sociedad Gestora.
Nuestro equipo gestor se encarga de implementar dichas carteras mediante la cuidadosa selección de gestores de reconocido prestigio internacional, para
cada uno de los activos potencialmente invertibles.
Los Fondos de inversión GPS permiten simplificar el proceso de inversión en 4 estrategias según el perfil de riesgo del inversor.
Para inversores que valoran la seguridad de sus inversiones y priorizan la preservación de capital. Se buscará la máxima rentabilidad, pero siempre que no suponga asumir riesgos importantes sobre su inversión ni menoscabo en la liquidez. Acepta que, en situaciones económicas excepcionales la valoración de su cartera pueda ocasionarle pérdidas de hasta un 5%-10% anual. El objetivo de rentabilidad de la estrategia será conseguir rentabilidades superiores a las que ofrecen las inversiones sin riesgo en aproximadamente 200 puntos básicos.
Para conseguirlo, el patrimonio se invertirá en una combinación de activos de renta fija, renta variable e inversiones alternativas. La inversión en renta variable oscilará entre el 15% y el 25%. La cartera se implementará a través de fondos de inversión gestionados por especialistas en cada clase de activo y vehículos de gestión pasiva eficientes en costes. Esta estrategia es recomendable para horizontes temporales no inferiores a 3 años.
Para Inversores que buscan superar a la inflación en el medio plazo y por tanto lograr un crecimiento real de su patrimonio financiero. Para ello están dispuestos a asumir riesgos controlados pero superiores a los aceptados por los inversores conservadores.
A nivel orientativo, acepta que, en situaciones económicas excepcionales la valoración de su cartera pueda ocasionarle pérdidas que pueden oscilar entre un 10%-15% anual. El objetivo de rentabilidad de la estrategia será conseguir rentabilidades superiores a las que ofrecen las inversiones sin riesgo en aproximadamente 400 puntos básicos.
Para conseguirlo, el patrimonio se invertirá en una combinación de activos de renta fija, renta variable e inversiones alternativas. La inversión en renta variable oscilará entre el 45% y el 55%. La cartera se implementará a través de fondos de inversión gestionados por especialistas en cada clase de activo y vehículos de gestión pasiva eficientes en costes. Esta estrategia es recomendable para horizontes temporales no inferiores a 5 años.
Para Inversores que buscan obtener una importante revalorización de su patrimonio en el largo plazo. Para ello están dispuestos a asumir riesgos elevados, si bien mantienen una parte de sus inversiones en activos de baja volatilidad para controlar el riesgo agregado.
A nivel orientativo, acepta que, en situaciones económicas excepcionales la valoración de su cartera pueda ocasionarle pérdidas que pueden oscilar entre un 15%-20% anual. El objetivo de rentabilidad de la estrategia será conseguir rentabilidades superiores a las que ofrecen las inversiones sin riesgo en aproximadamente 600 puntos básicos.
Para conseguirlo, el patrimonio se invertirá en una combinación de activos de renta fija, renta variable e inversiones alternativas. La inversión en renta variable oscilará entre el 65% y el 75%. La cartera se implementará a través de fondos de inversión gestionados por especialistas en cada clase de activo y vehículos de gestión pasiva eficientes en costes. Esta estrategia es recomendable para horizontes temporales no inferiores a 7 años.
Para Inversores que buscan maximizar la rentabilidad de su patrimonio en el largo plazo. Para ello están dispuestos a asumir el riesgo asociado a los mercados de renta variable. A nivel orientativo, acepta que, en situaciones económicas excepcionales la valoración de su cartera pueda ocasionarle pérdidas superiores al 20% anual. El objetivo de rentabilidad de la estrategia será conseguir rentabilidades superiores a las que ofrecen las inversiones sin riesgo en aproximadamente 800 puntos básicos.
Para conseguirlo, el patrimonio se invertirá en una combinación de activos de renta fija, renta variable e inversiones alternativas. La inversión en renta variable oscilará entre el 80% y el 100%. La cartera se implementará a través de fondos de inversión gestionados por especialistas en cada clase de activo y vehículos de gestión pasiva eficientes en costes.
Esta estrategia es recomendable para horizontes temporales no inferiores a 7 años.